El arte psicodélico es un tipo de arte inspirado
por la experiencia psicodélica inducida por distintos tipos de drogas, como el
LSD u otras drogas alucinógenas.
Dentro de este movimiento artístico se aprecian varias características:
Dentro de este movimiento artístico se aprecian varias características:
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Se utilizan frecuentemente
patrones parecidos a un Caleidoscopio, a fractales o inspirados en los
diseños persas.
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Uso de colores brillantes y
altamente contrastantes, obteniendo resultados muy llamativos.
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Extrema profundidad de
detalle o estilización del detalle.
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Mutación de objetos y
patrones, y algunas veces collage.
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Inclusión de motivos
fosfénicos y otros fenómenos entópicos.
Se pueden incluir dentro del arte psicodélico todas
aquellas obras que intentan reflejar estados alterados de conciencia,
usualmente producidos por el uso de substancias psicodélicas, o el que está
influido estéticamente por éstos. Así pues, habría que tener en cuenta el uso
de substancias psicodélicas, como hongos alucinógenos, por parte de múltiples
culturas alrededor del mundo.
Más claramente, se dieron casos en los movimientos modernistas del arte en los que algunos artistas usaban drogas psicodélicas como fuente de inspiración. Un claro antecesor del arte psicodélico fue el movimiento surrealista, en su intento de reflejar y crear imágenes y experiencias fantásticas y alucinatorias.
Los primeros en usar este nuevo “arte psicodélico” son, la mayoría, escritores literarios. Pero también encontramos referentes en el ámbito visual dentro del surrealismo.
María de los Remedios Alicia Rodriga Varo y Uranga (1908 – 1963) más conocida como Remedios Varo
André Masson (1896 – 1987) Pintor francés asociado al surrealismo y al expresionismo abstracto, nacido en Balagny.
Referente a los escritores cabe mencionar a Henri Michaux (1899 – 1984) poeta y pintor de origen belga, nacionalizado francés. Encontramos referencias a sus experiencias con la mezcalina y el hachís en su obra Misérable miracle, en 1956 y Connaissance par les gouffres, en 1961.
Albert Hofman, al ver el potencial del fármaco para poetas y artistas, lo uso como experimentos con ellos:
Janiger (persona con la que experimento Albert Hofman) pidió a un grupo de 50 artistas diferentes realizar una pintura de la vida de un sujeto a elección del artista. Se les pidió posteriormente hacer el mismo cuadro, mientras bajo la influencia del LSD. Las dos pinturas fueron comparadas por Janiger y también artistas. Los artistas casi unánimemente reportaron el LSD a ser una mejora a su creatividad.